Introducción
En los últimos años, el campo de la inmunoterapia ha surgido como un nuevo paradigma en el tratamiento de tumores avanzados con el desarrollo de nuevos agentes inmunoterápicos, como los inhibidores del check-point (ICP). Sin embargo, la activación del sistema inmunitario para atacar al tumor puede provocar reacciones adversas inmunomediadas inherentes a su mecanismo de acción. En este caso, presentamos a una paciente en tratamiento con Nivolumab (ICP) que desarrolló una injuria renal aguda, probable nefritis tubulointersticial aguda inmunomediada, que se trató empíricamente con corticosteroides

Caso
Paciente femenina de 78 años de edad con antecedentes de nefrectomía izquierda total en 2014 por tumor renal de células claras, desde hace 10 meses en tratamiento con Nivolumab por metástasis pulmonar. Consulta en guardia por astenia, hiporexia, mialgias, cefalea y disuria de 10 días de evolución. Al examen físico presenta registro de temperatura axilar 37.7°, sin otros datos positivos. En el laboratorio se evidencia leucocitosis, deterioro de la función renal con urea 118 creatinina 3.24 y un sedimento urinario inflamatorio. Se interpreta el cuadro, en primera instancia, como infección del tracto urinario + injuria renal aguda iniciando tratamiento antibiótico y balance hídrico positivo. Se toma muestra de orina que presenta proteinuria en orina de 24 horas en rango no nefrótico (0.31 gr) y parámetros de FeNa y FeU compatibles con necrosis tubular aguda. Posteriormente evoluciona con eosinofilia (15%) y ascenso de los valores de creatinina a 9.7 mg/dL asociados a anuria. Se interpreta el cuadro como probable nefritis tubulointersticial aguda inmunomediada secundaria a tratamiento con Nivolumab en ausencia de otra causa aparente. En contexto de paciente monorrena con rápido deterioro de la función renal, se evalúa riesgo beneficio y se decide prescindir de la biopsia renal e iniciar tratamiento con pulsos de corticoides. Evoluciona con mejoría clínica y remisión parcial del cuadro, con valor de creatinina al alta hospitalaria de 1,7 mg/dL

Comentario
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Conclusión
Con el advenimiento de la inmunoterapia en el tratamiento del cáncer, especialmente los inhibidores del check point como el Nivolumab y su prometedora efectividad terapéutica, es previsible que en los próximos años sea más frecuente encontrar pacientes con efectos adversos secundarios a estos inmunomoduladores. Consideramos importante tener en cuenta estos efectos para realizar un diagnóstico rápido y preciso y evaluar la necesidad de una biopsia renal o tratamiento empírico, dependiendo de la complejidad del contexto clínico de cada paciente