Introducción
La sifilis es una enfermedad reconocida mucho antes del siglo XV. Es una infección ocasionada por la espiroqueta Treponema pallidum y su principal forma de transmisión es la sexual. Actualmente el 90% se encuentra en regiones subdesarrolladas. Hoy, pese a que existe un tratamiento eficaz, económico y de fácil acceso, continúa siendo un problema de salud pública mundial debido a las altas tasas de infección que se registran año a año. La neuroinfección se inicia tras la invasión de LCR, lo cual puede ocurrir en estadios tempranos.

Caso
Paciente 20 años consulta por cuadro de cefalea, fotofobia, náuseas, mareos y fiebre de 7 días de evolución. Al examen físico no presenta signos meníngeos ni rigidez de nuca. En la analítica se evidencia leucocitosis (gb: 11.900) con neutrofilia 80%, PCR: 1.05 mg/dl , VIH negativo y VDRL reactiva con 128 dils. Se realiza TAC de cerebro sin hallazgos patológicos, y se toma muestra de PL con líquido opalescente con recuento celular de 16, hipoglucorraquia (37mg/dl), hiperprotinorraquia 657mg/dl y LDH menor a 24. Inicia tratamiento empírico con Ceftriaxona 2g/día y aciclovir a la espera de VDRL de LCR que se informa reactivo a las 24 hs decidiendose el reemplazo antibiótico con penicilina g sódica. Los hemocultivos y urocultivos cierran negativos y se realiza fondo de ojo que no evidencia presencia de uveítis. La paciente evoluciona favorablemente, recibe abordaje por salud mental y habiendo realizado 10 días de tratamiento con penicilina G sódica EV, recibe una dosis de penicilina g benzatínica y se otorga el alta hospitalaria con seguimiento por infectología.

Comentario
Si bien la afectación neumológica por la sifilis es conocida, requiere de la instauración del tratamiento oportuno para evitar las posibles secuelas.

Conclusión
En Argentina hay un incremento en la incidencia de casos confirmados de sífilis en la última década, siendo el diagnóstico de neurosífilis cada vez más frecuente, especialmente en coinfección con VIH. Por tal motivo debería intensificarse el testeo rutinario de sífilis aumentando la sospecha de neurosífilis en aquellos pacientes que presenten clínica compatible. Hablamos de una enfermedad prevenible y curable, resultando importante enfatizar en las políticas sanitarias que promuevan la prevención.