Introducción
La trombosis venosa del sistema nervioso central (SNC) es una patología rara que puede asociarse con complicaciones graves, como hemorragia subaracnoidea (HSA) e hipertensión intracraneana. Se presentan dos casos clínicos que desarrollaron dichas complicaciones durante su internación en clínica médica.

Caso
Caso 1: Mujer de 58 años que consulta por cefalea súbita intensa (10/10), acompañada de náuseas y vómitos. Se realiza tomografía de cerebro que evidencia hemorragia subaracnoidea en la convexidad frontal bilateral. Ante la persistencia de la cefalea y la aparición de alteraciones visuales, se sospecha trombosis venosa del SNC, por lo que se realiza una resonancia magnética (RMN) que confirma trombosis del seno longitudinal superior. Inicia anticoagulación con enoxaparina y posteriormente con acenocumarol. Evoluciona favorablemente, con mejoría de los síntomas, actualmente en seguimiento ambulatorio. Caso 2: Mujer de 33 años que ingresa por cefalea de 15 días de evolución y hemiparesia derecha. Tomografía de cerebro sin contraste sin particularidades. Por persistencia de la cefalea y referir diplopía, se decide realizar RMN de encéfalo que evidencia trombosis de los senos transverso y sigmoideo derechos. La paciente evoluciona con hipertensión endocraneana, confirmada por punción lumbar y fondo de ojo con edema de papila. Se inicia tratamiento con anticoagulación y acetazolamida, sin mejoría clínica, lo que motiva la colocación de una derivación ventriculoperitoneal. Evoluciona favorablemente con mejoría sintomática. Continua bajo seguimiento ambulatorio.

Comentario
La trombosis venosa cerebral representa alrededor del 0,5% al ​​1,0% de todos los accidentes cerebrovasculares y suele presentarse en adultos jóvenes. Estos casos muestran complicaciones inusuales de la trombosis venosa del SNC, como la hemorragia subaracnoidea y la hipertensión endocraneana refractaria al tratamiento médico. La HSA asociada a trombosis venosa cerebral es poco reportada en la literatura médica y debe sospecharse en casos donde la HSA no comprometa las cisternas basales. La evidencia sugiere que la anticoagulación temprana en estos casos es segura, y el riesgo de resangrado es bajo, en un porcentaje estimado menor al 5%. Si bien la hipertensión endocraneana es una complicación frecuente, la persistencia de ésta pese al tratamiento médico no lo es. Su tratamiento específico es objeto de debate dada la poca evidencia disponible. Las punciones lumbares seriadas y la derivación ventriculoperitoneal deben considerarse en estos casos aunque la evidencia de su eficacia es escasa.

Conclusión
Las complicaciones de la trombosis venosa cerebral pueden ser todo un desafío para el internista Estos casos resaltan la importancia de un enfoque multidisciplinario en la toma de decisiones terapéuticas en este tipo de pacientes, especialmente en un contexto donde la evidencia científica es limitada debido a la baja incidencia de la patología y sus complicaciones.