Introducción
La artritis séptica gonocócica es una infección poco común, producida por un patógeno de transmisión sexual, la propagación hematógena es la más frecuente. La forma de presentación es monoarticular, siendo la rodilla, tobillo o muñecas las más comúnmente afectadas. En pacientes inmunosuprimidos la sintomatología puede ser poco florida por la poca respuesta inflamatoria. El aislamiento del agente causal por artrocentesis hace el diagnóstico definitivo. La anemia hemolítica autoinmune (AHAI) producto de la destrucción de eritrocitos por anticuerpos dirigidos a antígenos propios de la membrana, puede ser secundaria a otras patologías autoinmunitarias, infecciones.

Caso
Paciente de sexo masculino de 19 años de edad, con antecedentes de AHAI mixta diagnosticada hace 7 meses, completó corticoterapia hasta hace dos meses, consultó por cuadro de 4 dias de evolución con artritis de rodilla izquierda y tobillo derecho, acompañado de dolor progresivo e impotencia funcional, sin fiebre. Laboratorio sin leucocitos, PCR elevada, anemia grave, hiperbilirrubinemia a predominio indirecto, LDH aumentada, coagulopatía, serologías negativas, prueba de coombs directa positiva (PCD), aumento de anticuerpos IgM,IgG y cd3 altos. Ecografía abdominal con hepato esplenomegalia, ecografía de rodilla que evidenció bursitis. Evoluciona con deterioro de parámetros de anemia y sintomatología asociada, por lo que requirió transfusión de glóbulos rojos con inicio de gammaglobulina con regular respuesta con infusión de rituximab, interpretándose como Anemia hemolítica autoinmune refractaria. Por gonalgia y limitación funcional se realizó RMN de rodilla izquierda que evidenció incremento del líquido articular, edema de partes blandas, se realizó artrocentesis diagnóstica y cultivo de líquido articular purulento, con aislamiento de gonococo, hemocultivos negativos, cumplió tratamiento con Ceftriaxona, requiriendo una toilette, con adecuada respuesta.

Comentario
La artritis séptica gonocócica provoca destrucción articular de forma rápida e irreversible, la morbilidad y secuelas son importantes, considerando el diagnóstico y tratamiento adecuado fundamentales. Se presenta un caso de paciente con AHAI mixta con brote hemolítico nuevo, por sospecha secundaria a infección con presentación inespecífica, la indagación clínica y el aislamiento del microorganismo en líquido sinovial asociado a la gravedad de instauración del cuadro inicial hizo primordial el uso de rituximab y antibioticoterapia permitiendo una evolución favorable.

Conclusión
En nuestro caso la artritis séptica condiciono a la reactivación de la Anemia Hemolítica Autoinmune mixta, por lo que radica la importancia de identificar al agente causal, iniciando la terapia adecuada de forma temprana.