HEPATITIS ISQUÉMICA EN RELACIÓN A ANEURISMA HEPÁTICO ROTO (#22021)
Introducción
Los aneurismas viscerales tienen una incidencia de 0.1-2%. El 20% de estos corresponden a aneurismas de la arteria hepática. Se presentan en su mayoría de forma asintomática, cuando presentan síntomas suele asociarse a rotura aneurismática, lo que conlleva una elevada mortalidad. En situaciones de compromiso hemodinámico, la hepatitis isquémica es una complicación infrecuente pero potencialmente mortal
Caso
Mujer, 75 años. Antecedente de histerectomía por patología benigna. Consulta por dolor abdominal en hipocondrio derecho acompañado de vómitos. No síndrome pigmentario, no fiebre. Al examen: regular estado general, palidez cutáneo mucosa, tiempo de recoloración menor a 2 segundos. Taquicardia de 107 cpm, presión arterial de 80/70 mmhg. Abdomen doloroso a la palpación de hipocondrio derecho, sin irritación peritoneal. Analitica inicial: Hb 10 mg/dl, normocítica, normocrómica, plaquetas 209.000mm/3, sin leucocitosis, BT 2.0 mg/dl, BD 0.94 mg/dl, BI 1.07 mg/dl, FA 133 U/L, TGO 443 , TGP 558 U/L, GGT 278 U/L, TP 84 %. Tomografía que evidencia aneurisma intrahepático de la arteria hepática derecha de 16 mm, cuello de 3 mm roto, sangrado activo, hematoma subcapsular 36 mm de espesor, hemoperitoneo, asociado a área de isquemia hepática en lóbulo derecho segmentos 7 y 8. Se realiza arteriografía de urgencia que evidencia arterias displásicas a predominio de la hepática derecha, dilataciones fusiformes secuenciales. Se procede a embolización del aneurisma intrahepático. Oclusión completa de la rama embolizada y preservación del flujo en el resto de arterias hepáticas. En las siguientes 24 horas presenta ascenso enzimático con valores que alcanzan 7160 y 7211 de TGP y TGO respectivamente. Descenso del TP a 50%, sin asociarse a encefalopatía. Tomografía de control sin cambios. Descenso progresivo de transaminas y normalización del TP. Se descarta la presencia de aneurismas en otros territorios. La paciente evoluciona favorablemente
Comentario
Los aneurismas de la arteria hepática son los segundos aneurismas viscerales en frecuencia. La localización en la arteria hepática común suele ser la más habitual, comprometiendo en una menor proporción de los casos la arteria hepática derecha. En cuanto a su etiología, la mayoría de los casos se deben a aterosclerosis seguido por displasia arterial. La arteriografía es el método diagnóstico de elección, ofreciéndonos al mismo tiempo una estrategia terapéutica. Pueden presentarse en un 30% con otros aneurismas viscerales y en un 40% con aneurismas en otros territorios. La mayoría de los pacientes no se presentan con isquemia hepática asociada, dada la circulación hepática dual, 70% portal, 30% hepática, y por la presencia de diferentes mecanismos compensatorios
Conclusión
Los aneurismas hepáticos son infrecuentes, así como su complicación con hepatitis isquémica. Ambas patologías con alta mortalidad. La resolución inmediata y la búsqueda de otros aneurismas en otros territorios es determinante para disminuir la mortalidad en estos casos
Tipo: Caso clinico
Palabras clave: hepatitis isquemica,anurisma hpatico
Categorias: Hepatología
Institución: Hospital Maciel
Ciudad: montevideo , uruguay
País: Uruguay