Introducción
La hepatitis aguda es una reacción inflamatoria en el parénquima hepático que lleva a la necrosis del mismo con aumento de transaminasas. Entre sus causas más frecuentes se encuentran las infecciosas, las tóxicas y las autoinmunes. Sin embargo debemos tener presente otras causas que si bien son menos frecuentes no dejan de ser importantes para guiar un tratamiento adecuado.

Caso
Paciente de 60 años con antecedentes de miocardiopatía dilatada de causa alcohólica con múltiples internaciones por insuficiencia cardiaca descompensada, fibrilación auricular anticoagulada que consulta por cuadro de disnea CF III- IV asociado a edemas y crepitantes bilaterales, se interpreta cuadro como insuficiencia cardiaca descompensada e inicia tratamiento con diuréticos y balance hídrico negativo, se realiza ecocardiograma que evidencia FEY severamente reducida con hipoquinesia global leve, ventrículo izquierdo con hipertrofia excéntrica severa y ventrículo derecho levemente dilatado. Evoluciona con ictericia e hipotensión arterial asociado a elevación de transaminasas por 20 veces (GOT 899, GPT 626 FAL 105 Gamma GT 83) y elevación de bilirrubina (BT 3.33 BD 2.38) con QUICK normal. Se interpreta probable hígado de sepsis por presentar hemocultivos positivos para SAMS ½ e inicia tratamiento con cefalotina. Sin embargo persiste con registros de presión arterial baja sin mejoría de las transaminasas habiéndose descartado causas virales y tóxicas. Se repite ecocardiograma donde no se observan vegetaciones y se evidencia deterioro severo de la función del VD, se decide su pase a unidad cerrada donde inicia tratamiento con Dobutamina evolucionando favorablemente con normalización del hepatograma a valores basales, y mejoría de los valores de la presión arterial. Es dado de alta a su domicilio.

Comentario
La hepatitis isquémica se define por la elevación aguda y reversible de transaminasas asociada a trastornos en la perfusión hepática, luego de haber excluido otras causas de hepatitis aguda. Algunas condiciones como la insuficiencia cardiaca crónica especialmente con falla derecha y la congestión hepática pasiva favorecen el desarrollo de una hepatitis isquémica.

Conclusión
La sospecha y la detección es importante para poder corregir el factor hemodinámico descompensante y así poder evitar el daño de órgano irreversible.